Lugar donde se deja evaporar agua salada para dejar solo la sal, secarla y recogerla luego para su utilización, consumo o venta. Se distinguen dos tipos de salinas: las salinas costeras, situadas en las costas para utilizar el agua de mar, y las salinas de interior, en las que se utilizan manantiales de agua salada debido a que el agua atraviesa depósitos de sal subterráneos. (Wikipedia)

«Los últimos rayos del sol se refractaban sobre las salinas como a través del cristal de un invernadero. Allí abajo, no solo todas las pozas reflejaban intensos destellos púrpuras que se desvanecían en reflejos más claros, sino que toda la vasta extensión entre las montañas y la playa ardía, iluminada por una lenta llama de brasa, como un ópalo gigantesco.»
Ernst Jünger (1895-1998) Novelista, filósofo nacionalista, militar y entomólogo alemán

ARAYA (Araya) – 1959

Director Margot Benacerraf
Guion Margot Benacerraf y Pierre Seghers
Fotografía Giuseppe Nisoli
Música Guy Bernard
Producción Caroni Films C.A./Films de l’Archer
Nacionalidad Venezuela
Duración 90m. B/N

«La vida toda venía del mar. Y de las bodas del mar y del sol nacía la sal sobre esta tierra. Un día unos hombres desembarcaron sobre estas tierras áridas donde nada crecía, donde todo era desolación, viento y sol. Llamaron a estas tierras Araya.»

Figura esencial de la cultura latinoamericana, especialmente recordada por su decisiva labor pionera en el desarrollo y la institucionalización del cine venezolano, Margot Benacerraf limitó su desempeño como realizadora a dos documentales de una excepcional sensibilidad artística: REVERÓN (1952), sentido tributo a la vida y obra del excéntrico artista plástico caraqueño Armando Reverón, y esta hipnótica descripción de ingente arrojo poético y humanista sobre la ancestral explotación de la salina natural de Araya, ubicada al nordeste de la denominada patria tricolor. En una incomparable conjunción de belleza paisajística y sufrimiento proletario, acompasada por la voz en off del dramaturgo José Ignacio Cabrujas, transmitía en pictóricas imágenes una íntegra jornada en el severo quehacer laboral y cotidiano de dos familias de salineros (los Pereda y los Salazar) y otra de pescadores (los Ortiz). Delicadeza plástica y compromiso social se aunaron en esta deslumbrante manifestación acerca del consustancial vínculo simbiótico entre el ser humano y el hostil entorno medioambiental.

Otras películas ambientadas en zonas de SALINAS

La ragazza della salina – Frantisek Cáp (1957)
Alrededor de las salinas – Jacinto Esteva (1964)
Salinas grandes – Miguel Kohan (2004)